1Los músicos espinariegos participaron en una concentración de charangas en esta localidad soriana
Tras el paso de un verano sin descanso, la recién inaugurada temporada de invierno comienza fuerte para la charanga El Boquerón en nuestras tierras vecinas, concretamente en la localidad soriana de San Esteban de Gormaz. Bien entrada la madrugada iniciamos nuestro camino hasta el pueblo de la concentración de charangas, donde tuvimos nuestra primera toma de contacto con los organizadores, concejales y el resto de charangas con las que íbamos a compartir un día lleno de música y diversión. Las bajas temperaturas nos destemplaron el cuerpo, pero no los ánimos, ya que tuvimos un cálido recibimiento y el trato de sus gentes fue impecable.
En primer lugar, nos presentaron el alojamiento y tuvimos un breve aperitivo con nuestros compañeros músicos. Una vez estaban montados y afinados nuestros instrumentos, recorrimos todo el pueblo con el ritmo de nuestros pasacalles, finalizando este primer recorrido en el ayuntamiento, donde se nos agradeció nuestra participación con un regalo por parte de los organizadores y recibimos unos llaveros personalizados con el logotipo de la séptima edición de este evento. Después de esta presentación iniciamos el recorrido por los bares sanestebeños. Sobre las 2 del medio día, nos dirigimos todas las charangas hacia el pabellón municipal donde se realizó la comida popular.
Tras un merecido descanso, y con las pilas bien cargadas, cada charanga se preparó para realizar un pase de aproximadamente 10 minutos sobre un escenario en este mismo complejo. Los instantes previos a nuestra actuación, los nervios y la emoción recorrían nuestros cuerpos. Una vez en el escenario, y preparados para dar lo mejor de nosotros, iniciamos nuestro pase con uno de nuestros arreglos estrella, con el cual la gente bailo, disfrutó y cantó a pleno pulmón los clásicos del pop español.
Al bajar del escenario nos sentimos sobrecogidos por nuestros familiares y lugareños. Posteriormente, iniciamos el último recorrido del día, disfrutando lo poco que nos quedaba por hacer pasar un buen rato a la gente. Terminado el evento y guardados ya los instrumentos, nos dirigimos de nuevo al pabellón para cenar. Con el estómago lleno y con ganas de seguir exprimiendo esta experiencia en este maravillo pueblo, todos disfrutamos de la noche soriana, a pesar del cansancio acumulado durante la dura jornada.
Agradecemos enormemente a todas las personas involucradas en este evento, especialmente a las charangas participantes por compartir juntos lo que más nos gusta, hacer disfrutar a la gente con música, y sobre todo, a la charanga Salmonete Band por su magnifico trato y contar con nosotros para esta bonita experiencia.
Charanga El Boquerón