⬆️ PROHIBIDA LA REPRODUCCIÓN DE LA IMAGEN ⬆️
PRETÉRITO IMPERFECTO – ✍🏻 CARLOS PARRILLA
Con solo 28 años había perdido una guerra, una patria y hasta su nombre, sólo era el número 5420 cuando su cuerpo terminó en el crematorio de Gusen, una dependencia del campo de concentración de Mauthausen.
Félix nació en El Espinar el 25 de marzo de 1914, el menor de los cuatro hijos de Juan Bartolomé Martín y Tomasa Barreno Ordóñez. Vivió su infancia en Madrid junto a su madre y sus hermanos (el padre quizá había fallecido) en la calle de los Jesuitas nº 2, cerca del Puente de Segovia, compartiendo un piso bajo con otros espinariegos. Aunque una familia humilde deja poco rastro en los documentos, sabemos que en 1920 su madre trabajaba como asistenta en varias casas de la capital, con un jornal de dos pesetas diarias.

Ficha de miliciano. España. Ministerio de Cultura. Centro Documental de la Memoria Histórica PS-SM-C0718. PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN
Desde muy joven Félix empezó a ganarse la vida como albañil y pocero, profesión que marcó su destino durante la guerra civil y le acompañó hasta el último registro del campo de concentración.
Al estallar la guerra estaba soltero y había trasladado su residencia no lejos, a la calle Soldado José María Rey nº 9 del entonces pueblo de Carabanchel Bajo. Afiliado al sindicato anarquista CNT, formó parte del llamado “Batallón Primero de Mayo”, compuesto mayoritariamente por obreros de la misma zona. En la fotografía de su ficha de filiación (10-1-1937) se ve a un joven alto, bien parecido y con mirada profunda. (1)

Félix Barreno en su ficha de miliciano. España. Ministerio de Cultura. Centro Documental de la Memoria Histórica PS-SM-C0718.
Su experiencia como albañil resultaba imprescindible en una ciudad rodeada de trincheras y fortificaciones, por ese motivo en abril de 1938 trabajaba en las obras del formidable búnker conocido en clave como “posición Jaca”, en el barrio madrileño de la Alameda de Osuna, junto a Barajas, donde se estableció el cuartel general de Miaja para la defensa de la ciudad. Pero la marcha de la guerra quedó sentenciada a partir del otoño de 1938 tras la batalla del Ebro y la posterior Campaña de Cataluña.
CAMINO DEL EXILIO
En ese momento se produjo el éxodo de miles de republicanos españoles en dirección a Francia, algunos a pie y sólo con lo puesto. Las autoridades francesas dirigieron aquella oleada de refugiados hasta unos inhumanos campamentos, entre alambradas y guardias, en las playas de Argelès y S. Cyprien, de los que fue testigo de excepción el también espinariego Mariano Gómez Fernández, que escribió una crónica descarnada de lo que sería sólo el preludio del verdadero horror.
En septiembre de 1939 estallaba la Segunda Guerra Mundial, aunque las hostilidades en Francia tardarían varios meses en desatarse. En ese tiempo Félix Barreno se integró “voluntariamente” en la CTE 139, Compañía de Trabajadores Extranjeros, donde la “E” igual podía significar Extranjero que Español, ya que prácticamente todos lo eran. Estas compañías se dedicaban a labores agrícolas en sustitución de los jóvenes franceses, alistados en el ejército y sobre todo a trabajos de fortificación. Aunque el trato en aquellos CTE era más humano que en las playas de Argelès, seguían bajo vigilancia y sometidos a disciplina militar, separados de los franceses. Durante ese periodo Félix trabajó en el sector de Suippes, cerca de Reims.

La cantera de Mauthausen
Con la caída estrepitosa de Francia en solo seis semanas (mayo-junio de 1940), la mayoría de los trabajadores españoles fueron capturados por los alemanes. Inicialmente se les consideró prisioneros de guerra e internados en unos campamentos donde sus condiciones eran relativamente dignas, protegidos por la Convención de Ginebra, en concreto Félix pasó por el Frontstallag 140, campo de tránsito situado en la fortaleza de Belfort (Borgoña) y enviado más tarde al Stallag IX-B en Fallingbostel (Alemania) con número de prisionero 87233. Sin embargo, al no ser reconocidos por el nuevo gobierno de Madrid, los reclusos españoles pasaron a ser considerados apátridas y “presos políticos”, con lo que su porvenir se volvió aún más negro. Tras un espantoso viaje de ferrocarril con otros centenares de españoles, la madrugada del 27 de enero de 1941 Félix llegaba al infierno de Mauthausen (Austria).
EN BUSCA DEL HERMANO
Los familiares de Félix no perdieron la esperanza de encontrarlo. Su hermana mayor, Maximina, por medio de la Cruz Roja española, envió una petición de información sobre su paradero el 23 de febrero de 1942. La respuesta fue alentadora. Mediante nota del 12 de mayo de 1942, la Cruz Roja alemana daba traslado del breve informe de la Oficina Central de Seguridad del Reich, según la cual, Félix Bartolomé estaba internado en Mauthausen, “se encuentra sano y en condiciones de trabajar”. En el mes de junio, sería Juan Taravillo, quizá un amigo o un familiar, quien rellenó el formulario para pedir nueva información.

Mauthausen
Por entonces, Félix vestía la blusa de rayas azules y llevaba cosido el número 5420 junto al triángulo azul invertido con la letra S, la paradoja de ser al mismo tiempo apátrida y Spanier (español).
Finalmente, en el otoño de 1942 fue trasladado al sub-campo de Gusen, el “matadero” de Mauthausen, donde perecieron unos 4.000 españoles. Extenuados por el trabajo, las enfermedades, el hambre y el maltrato, con temperaturas gélidas, no había esperanza para los que entraban en Gusen. Félix murió el martes 24 de noviembre de 1942 y su cuerpo se convertía en cenizas en el crematorio del campo. En la ficha que certifica su muerte, se puede leer: Nacimiento – Espinar (Segovia). Profesión – pocero (brunnerarbeiter). Residencia – Carabanchel Bajo. Religión – ninguna. Familiares próximos – hermano Maximino (realmente hermana, Maximina).

KONICA MINOLTA DIGITAL CAMERA
Su nombre, con el de otros 90.000 muertos en el campo, aparece escrito en el Memorial de Mauthausen que se levanta en aquel lugar de horror, hoy de recuerdo.
Sabías qué:
Además de Félix Bartolomé, otros once segovianos murieron en el campo de concentración de Mauthausen y uno más en el de Dachau.
FUENTES:
(1) España. Ministerio de Cultura. Centro Documental de la Memoria Histórica PS-SM-C0718
- Bermejo y S. Checa. Libro Memorial. Españoles deportados a los campos nazis.
Periódico Castilla Libre 18/4/1938
Francia-BNF Gallica Liste de Prissoniers
Austria-Archivos Arolsen Cod. 01012603 011.151
Gracias a todas las personas que han ayudado en la redacción de este artículo.