La competición tendrá lugar este sábado 24 de mayo a las 18:00h en la Plaza de Toros de Azpeitia
El Duatlón Vasco se celebrará el próximo sábado 24 de mayo a las 18:00h en la Plaza de Toros de Azpeitia con importantes novedades en su desarrollo. Este año, la organización ha apostado por un cambio en el formato, reduciendo la distancia total y aumentando las transiciones entre tramos, con el objetivo de hacer la competición más dinámica tanto para los participantes como para el público.
Uno de los deportistas que vuelve a la cita con el mismo entusiasmo de siempre es Emilio García, natural de El Espinar, quien destaca el buen nivel de los inscritos y la evolución positiva de la prueba: “Cada vez se apunta más gente, y con un nivel muy alto. La competición está creciendo mucho”, asegura.

Emilio García en la prueba del año pasado
En ediciones anteriores, el recorrido consistía en dos cortes horizontales de tronco de 45 pulgadas, una carrera de dos kilómetros con 20 vueltas al ruedo de la plaza de toros, y finalizaba con dos cortes verticales del mismo calibre. En cambio, este año el formato se ha modificado: se inicia con un corte horizontal, seguido de uno vertical, medio kilómetro de carrera con cinco vueltas, y después se repite la misma estructura. “Para nosotros será más duro por las transiciones, pero para el público creo que será más divertido y ameno”, explica.
Además, la prueba se ha dividido en dos categorías. Los seis mejores del año pasado compiten directamente en la primera, mientras que otros 20 participantes lucharán por las seis plazas restantes para disputar la gran final. Emilio forma parte de este segundo grupo.
Su preparación, sin embargo, no ha sido la ideal. Una fractura en un dedo de la mano le impidió entrenar con normalidad durante los primeros meses del año. “No pude tocar el hacha hasta marzo. Ha ido todo un poco justo, pero en el último mes y medio hemos podido hacer buenos entrenamientos y ahora empiezo a encontrarme bien”, señala.
El espinariego también ha querido destacar el apoyo recibido por parte de su entorno. Agradeció especialmente al Ayuntamiento de El Espinar, por facilitar el uso de la plaza para entrenamientos, a su compañero y amigo Víctor Suárez, que le ha estado ayudando durante los fines de semana, y a su familia: “Mi mujer, que ha tenido que asumir mucho más desde que tuvimos un bebé; mis padres, que son clave en el día a día, incluso en temas como la alimentación… Todo esto no sería posible sin ellos”.
Emilio afronta la cita con prudencia, pero también con confianza: “Este nuevo formato es algo desconocido y no sabemos bien cómo irán los tiempos. Pero vamos con ilusión, con ganas de hacerlo bien y, sobre todo, con la intención de volvernos contentos”.